Cuando se está en Ibiza es casi una obligación ir a Formentera porque están muy cerca y ambas gozan de naturaleza única y cautivadora. Están separadas solo por 3,4 kilómetros y se puede llegar en 30 minutos en ferry. Esta viaje merece la pena porque los paisajes, rincones, playas y fiestas quizás te conquisten más que Ibiza, porque Formentera en los últimos años ha incrementado notablemente el número de turistas.