Por muy sencillo y atractivo que pueda resultar endulzar los datos para conseguir un mayor apoyo de una entidad financiera, caer en ello puede terminar por ser una verdadera catástrofe. Cualquier banco está capacitado para indagar y realizar cálculos para contrastar cualquier información ofrecida, y sin duda lo hará. Poner todas las cartas sobre la mesa, y esforzarse por tener un plan lo más realista y viable posible, es la mejor opción.