Evita la exposición al sol y la luz directa defendiendo tu ramo de flores de cualquier fuente de calor como radiadores, estufas y vitrocerámicas. Además, las flores no deben colocarse cerca de electrodomésticos en funcionamiento, como hornos de microondas, acondicionadores de aire o ventiladores. Especialmente en verano, coloca el ramo en un área sombreada que también esté ventilada.